SINTOMAS Y
SINCRONISMOS ENERGETICOS
1) Encuentro
con personas del mismo grupo de almas. Nos encontramos con una o varias
personas con las cuales nos sentimos totalmente conectados o compenetrados.
Sensación de corazón abierto, mucha emoción y deseos de fundirnos con el o los
otros. Esto se puede dar en grupos grandes.
2) Encuentro
con gemelos del mismo rayo. Nos encontramos con una persona de nuestra misma
vibración, no se necesitan palabras para comunicarnos, establecemos una
comunicación telepática, amorosa, sin compromiso, no nos importa su historia
personal, hay una aceptación total, no establecemos agendas ni estrategias,
fluimos en el momento. Cuando nos encontramos físicamente se genera una energía
que los demás notan algo así como eléctrica.
3) Sueños muy
placenteros. Nos despertamos con la sensación de haber estado en un lugar muy
hermosos y con seres maravillosos, recordamos con mucho detalle el lugar, la
naturaleza es exuberante y hermosa, hay luces de colores, cristales, dorados,
platinos...algunas veces nos dan mensajes muy claros, otras simplemente sentimos
la energía amorosa y gozosa. Nos despertamos felices, la sensación se prolonga
por el día.
4)
Visualización de energía. Vemos flotando a nuestro alrededor esferas de
colores, ORBS o geometrías de luz, le vemos los destellos de luz en el aura de
otros. Otros ven el chacra del corazón con el mándala de triángulos tántrico
iluminado en el pecho o el tercer ojo con su color índigo.
5) Sensación
de sincronicidad. Todo fluye sincrónicamente, salimos a la calle. Los semáforos
todos en verde, siempre hay sitio para nuestro vehículo. Los relojes marcan
11.11, 2:22, 3:33, 4:44 hasta 5:55, las placas de los autos también con números
maestros. Pensamos en que necesitamos solucionar algo y se presenta sola la
solución. Pensamos en alguien que queremos llamar o ver y se nos aparece. Todo
fluye en sincronía, somos como el agua.
6) Confianza
en que todo está bien. Actitud de observación. Mirar la realidad externa y a
pesar de lo que vemos mantenemos la confianza internamente e inalterable de que
todo está bien, sentimiento de certeza, seguridad y protección absoluta.
7)
Visualización y sensación de que todo se funde alrededor. La realidad común
comienza a vibrar y se hace transparente, todo parece vivo. Sensación muy
fuerte de Unidad, no hay separación en estos estados de vibración, sensación de
estar siempre acompañados, nuestro cuerpo vibra con todo. Éxtasis.
8) Amor
incondicional por todo y todos, todos a nuestros ojos son iguales, los vemos
sólo como seres humanos y seres vivos, necesidad de dar gracias. Nuestro corazón está
abierto y nos sentimos amorosos con todo. Las lágrimas se saltan por cualquier
cosa y nos sentimos vulnerables, sensibles pero tranquilos. Todo es divino,
todo es sagrado.
9) Aromas de
rosas y otras flores. La madre divina, los ángeles y muchos otros maestros
sensibles, nos dan el regalo de la manifestación de su aroma, muchas veces
cuando estamos en grupos de meditación o sanación. El bálsamo del aroma permite
que nos centremos y relajemos. Nos rompe las estructuras racionales, el
escepticismo y nos hace pensar en los milagros.
10)
Experiencias extáticas espontáneas. En forma inesperada nuestro cuerpo físico
nos regala una sensación de bienestar, nuestra energía vibratoria se pasea por todo el cuerpo
y nos produce mucho placer y una inmensa sensación de tranquilidad y paz, somos
esencia pura, divina e igualmente la irradiamos a los demás.