CONCIENCIA

CONCIENCIA, La Clave Para Vivir En Equilibrio: Es un blog diseñado para publicar información respecto a aprender a vivir en armonía, paz y felicidad constante; es un proceso sencillo, es estar atentos al momento en que vivimos, la CLAVE es estar atentos al AHORA, dejar un poco la mente en quietud, se puede conseguir, es un proceso que poco a poco te despertará la CONCIENCIA, se consigue con un ejercicio fácil y continuo, debemos concentrarnos en nuestra respiración, inhalar y exhalar, naturalmente, así como lo hacemos todo el tiempo, la diferencia radica en estar atentos al proceso; cuando empieza a hacerlo se vuelve costumbre, es una especie de meditación, ya que la mente no puede pensar y concentrase en la respiración al mismo tiempo.
Así se realice solo por segundos las primeras veces, la continuidad del ejercicio, efectuará cambios poco a poco en el cerebro, igualmente en las emociones, ayudará a controlar la tristeza, el estrés, la ira, la ansiedad, el dolor emocional, la angustia, y todas las emociones que hemos manejado toda la vida, porque la mente es como un caballo desbocado, todo el día nos ataca con pensamientos continuamente, las estadistas que existen al respecto de los pensamientos es de 60.000 al día de los cuales el 95% son repetitivos, los cuales no llevan generalmente a soluciones efectivas, solo se consigue mantener un estado alto de estrés constante.
Realizando el ejercicio de respiración, los pensamientos se irán calmando y las emociones serán controladas, con el tiempo de práctica se logran excelentes resultados y el tiempo del mismo se ira ampliando solo naturalmente. Es para vivir y para iniciar un proceso de calma y tranquilidad en la vida, para conocer el secreto de vivir en equilibrio, además hay otras CLAVES, mucho más sencillas que con el tiempo de práctica se irán dando, iré igualmente brindando información al respecto de CONCIENCIA, La Clave Para Vivir En Equilibrio.

viernes, 29 de agosto de 2014

Conócete a ti mismo

Conócete a ti mismo… Da lugar a la alegría!!!
Conocerse a uno mismo es muy elemental. No es difícil, no puede serlo. No necesitas aprender nada para saber quién eres, sólo tienes que desaprender algunas cosas.
La primera, tienes que desaprender que te importen las cosas. La segunda, tienes que desaprender que te importen los pensamientos. La tercera cosa se da por sí sola: ser testigo.
La clave es, primero, empezar a observar las cosas. Sentado en silencio, mira un árbol y mantente observador.
No pienses en él. No digas: “¿Qué tipo de árbol es?”. No juzgues si es hermoso o feo. No digas “es verde” o “está seco”.
No crees ondas de pensamientos alrededor de eso, sólo mira el árbol. Puedes hacerlo donde sea, observando cualquier cosa. Sólo recuerda algo: cuando el pensamiento venga, hazlo de lado. Aviéntalo hacia un lado y sigue viendo lo que veías.
Al principio será difícil, pero después de un tiempo empezarán a darse intervalos en los que no hay pensamiento.
Encontrarás que surge una gran alegría a partir de esa sencilla experiencia. No ha pasado nada, es sólo que los
pensamientos no están ahí. El árbol está ahí, tú estás ahí y entre ambos hay espacio. El espacio no está lleno de
pensamientos. De repente hay una gran alegría sin razón aparente, sin razón alguna. Has aprendido el primer secreto.
Esto debe usarse de una manera más sutil. Los objetos son toscos, por eso digo que comiences con un objeto.
Puedes sentarte en una recámara, mirar una fotografía; lo único que hay que recordar es no pensar en ella. Sólo mira sin pensar. Lentamente empezará a suceder. Mira la mesa sin pensar y poco a poco la mesa está ahí, tú estás ahí y no hay ningún pensamiento entre ambos. Y repentinamente: alegría. La alegría es función del no pensar. La alegría ya está ahí; está reprimida por tantos pensamientos. Cuando los pensamientos no están, sale a la superficie.

Comienza con lo tosco. Después, cuando hayas entrado en sintonía y hayas empezado a sentir momentos en que los pensamientos desaparecen y sólo los objetos están ahí, haz lo que sigue.
Cierra los ojos y observa cualquier pensamiento que pase, sin pensar en el pensamiento. Surge algún rostro en la
pantalla de tu mente o se mueve una nube o cualquier cosa; solo obsérvala sin pensar.
Esto será un poco más difícil que lo primero porque las cosas son más toscas, los pensamientos son muy sutiles.
Además, si ha sucedido lo primero, sucederá lo segundo; sólo se necesita tiempo. Observa el pensamiento. Después de
un rato. Puede suceder después de semanas, puede suceder después de meses o puede tomar años, depende del empeño y la entrega con que lo hagas. Entonces un día, de repente, el pensamiento ya no está ahí. Estás solo. Surgirá una gran alegría, mil veces mayor que la primera que surgió cuando el árbol estaba ahí y el pensamiento había desparecido. ¡Mil veces! Será tan intensa que estarás desbordante de alegría. Este es el segundo paso. Cuando esto empiece a suceder, haz la tercera cosa: observa al observador. Así, ya no habrá objeto. Se han desechado los objetos, y los pensamientos; estás solo. Entonces simplemente observa al observador, sé testigo de que estás siendo testigo.
Nuevamente será difícil en un principio porque sólo sabemos cómo observar algo: un objeto o un pensamiento.
Incluso un pensamiento cuando menos es algo que observar. En ese momento no habrá nada, será el vacío absoluto.
Sólo queda el observador. Tienes que volverte hacia ti. Esta es la llave más secreta. Simplemente sigue estando ahí solo. Descansa en esa soledad y llegará un momento en que suceda. Tiene que suceder. Si han sucedido las dos primeras cosas, sucederá la tercera; no te preocupes por ella. Cuando esto pase, por primera vez sabrás qué es la alegría. No es algo que te esté sucediendo y pueda irse. Eres tú en tu ser auténtico, es tu ser verdadero. Entonces no desaparece. No hay manera de perderla. !!!Has llegado al hogar!!!. Tienes que desaprender cosas, pensamientos. Primero observa lo tosco, después observa lo sutil y después observa lo que está más allá de lo tosco y de lo sutil.
(Osho).


MI OPINION:



Cuando empiezas a hacerlo es un poco difícil como todo al principio, es empezar a practicar, es disciplina, es constancia, cada vez que te acuerdes practícalo, se volverá costumbre y cada vez será más frecuente, hasta que se vuelve un estado natural, es un ejercicio excelente, es meditación, es dejar la mente quieta y entrar en el silencio que conecta con tu alma, es la CLAVE PARA EL EQUILIBRIO!!!